Obradoristas fundadores del movimiento de la Cuarta Transformación ven con desencanto la rápida descomposición política de Morena en Puebla, como partido de “izquierda”. La incorporación gradual y constante a Morena de personajes priistas connotados, cuadros dirigentes y militantes de base, empieza a desdibujar el proyecto de un gobierno del pueblo.

El principal malestar de los morenistas es la exclusión de los fundadores en las candidaturas a cargos de elección popular como alcaldes o legisladores.

Pero más allá de los fundadores, hay un desencanto por la postulación de personajes sin méritos como luchadores sociales, o de ex alcaldes que repiten, pese a los malos resultados de gobierno.

Lo más grave que observan muchos morenistas son los acuerdos cupulares para beneficiar con cuotas de poder a familias como la del líder del grupo parlamentario en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco.

No obstante, la principal preocupación de la militancia con formación política y compromiso ideológico, son los primeros signos de la derechización de Morena, y del proyecto de la Cuarta Transformación.

La expresión más nítida de este fenómeno de “derechización” de Morena es la postulación del empresario texilero José (Pepe) Chedraui Budib como candidato a alcalde de la ciudad de Puebla.

Por sus solos antecedentes empresariales como dueño de empresas textiles -negocio familiar-, no encaja en ninguno de los principios del autollamado “movimiento de transformación”, empezando por “primero los pobres”.

No hay en la tradición familiar de los Chedraui Alam el estar al lado de los pobres, o tener arraigo con ese segmento mayoritario de la población, ni por asomo o caridad altruista.

La preocupación legítima de morenistas de base es que en poco ayudarán a ganar la mayoría absoluta en las cámaras federales, con la lista de candidatos ajenos a Morena, como Tony Gali López, o impopulares como Karina Pérez Popoca, Claudia Rivera Vivanco o Rosario Orozco.

Lejos de sumar a favor de la causa de la candidatura presidencial de Claudia Sheinbaum Pardo, la calidad y el nepotismo de los abanderados por las diputaciones federales, poco van a redituar en la votación para tener el control de las cámaras Alta y Baja.

En el caso de la ciudad capital, posterior a la imposición desde el centro del país de la candidatura de un empresario y ex priista, el ala dura del movimiento obradorista, y la influencia social que tienen, difícilmente de volcará a favor de Pepe Chedraui, a quien consideran un advenedizo.

Ese efecto de desencanto en el obradorismo por los signos de “derechización” de Morena y la 4T, tendrá irremediablemente sus efectos en la zona metropolitana, lo que favorecerá al frente opositor.

La disputa de la ciudad capital entre Morena y los partidos satelitales contra el frente opositor y paridos bonsai (PSI y PRD) se antoja de pronóstico reservado, y en una narrativa del “pueblo bueno” de pobres, un empresario de los ricos, no encaja en el discurso morenista.

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Face: Pablo Ruiz Meza

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