EFE.- La Unión Europea (UE) evitó concretar un nuevo paquete de sanciones contra Rusia, mientras Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron más represalias.

Al cumplirse un mes del inicio de la invasión de Ucrania, el objetivo del maratón de cumbres en Bruselas —reunión de la OTAN, del G7 y un Consejo Europeo donde participó como invitado excepcional el presidente de EU, Joe Biden— era poner de manifiesto la unidad de los socios occidentales contra el presidente ruso Vladimir Putin.

Los líderes europeos mantuvieron un debate de hora y media con Biden, en el que se insistió en la necesidad de que Washington y los 27 países europeos se mantengan “unidos” y “alineados en sus sanciones”.

En las conclusiones aprobadas al final de la cita, la UE volvió a pedir hoy a Rusia que cese los ataques, permita la creación de corredores humanitarios para evacuar a civiles, el acceso a la ayuda humanitaria y que libere a los rehenes.

EU y la UE reflejaron su “disposición a adoptar medidas adicionales y detener cualquier intento de eludir las sanciones“, pero no se concretaron nuevos correctivos.

Tras cuatro paquetes de castigo contra la economía rusa, fuentes europeas señalaron que la UE trabaja en más sanciones, pero a futuro.

También intervino en la cumbre, por videoconferencia, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien agradeció a los países occidentales su apoyo “militar y humanitario”, pero pidió más sanciones contra Rusia y contra el sector energético que alimenta la maquinaria de guerra de Putin.