La medida también incluye la retención del vehículo así como la obligatoriedad para el uso de chaleco y casco.

El funcionario explicó que el ayuntamiento ha diseñado un programa que como primera etapa busca hacer conciencia mediante la proximidad social con los ciclistas, regresándolos cuando vayan en sentido contrario sin sanción alguna.

Dependiendo de la respuesta que se tenga por parte de los usuarios de este medio de transporte se determinará si entra en vigencia la segunda etapa que implica el cobro señalado, aunque no existe una temporalidad determinada.

La regulación se aplicará con mayor persistencia en el primer cuadro de la ciudad y en las vialidades importantes que conecten con las juntas auxiliares.

Señaló que la intención principal de la medida es evitar que se presenten incidentes viales que pongan en riesgo la integridad de los ciudadanos.

Destacó que el ayuntamiento que preside José Juan Espinosa Torres, ha desarrollado la infraestructura adecuada para facilitar la movilidad y dar seguridad a los ciclistas por medio de ciclovías bien delimitadas, que cuentan con señalamientos y ambos sentidos.